Publicado en Levante EMV el 5 de Julio de 2012.
Ante las afirmaciones recogidas por la prensa del Sr. Rosado, Conseller de
Sanitat del Govern Valenciá, durante una conferencia en el marco del Foro
Sanitario Alzira, uno se queda estupefacto.
Ha sido capaz de confesar públicamente que los gobernantes de nuestra comunidad
en los últimos diecisiete años conocían por informes que el gasto en sanidad no
era viable por ser deficitario pero no hicieron caso a estos informes para no
perder las elecciones.
Antes estas afirmaciones surgen múltiples preguntas que no puedo dejar de
formular:
¿Cómo puede ser que estas declaraciones no tengan consecuencias en una sociedad
civilizada y democrática?
¿Cómo es posible que en sanidad se haya actuado así con el visto bueno del
gobierno y del parlamento?
¿Cómo puede ser que la justicia no haya iniciado diligencias de oficio ante las
conclusiones que se pueden inferir de las palabras del Conseller?
¿En qué manos se encuentra el gobierno del pueblo valenciano?
¿Es lícito establecer actuaciones con importante repercusión en la vida de los
ciudadanos cuando no estaban especificadas en un programa electoral? ¿No resulta
una perversión de la democracia?
¿Cómo es posible que no se haya publicado ningún comentario crítico ante esta
falta de respeto a la dignidad de los ciudadanos?
¿Por qué nadie dice nada?
Blas Bernacer.
Médico Internista.
Delegado Sindical del Simap.