Europa económica y Europa social: sólo importa la primera.
Publicado en el Levante EMV el 22 de octubre de 2006
En los últimos meses se ha informado en los medios de comunicación sobre la intención de compra de la empresa E.On sobre la española ENDESA. El gobierno español estableció una condiciones rigurosas para dicha compra que fueron cuestionadas por la Comisión Europea, la cual ha instado al gobierno español a la modificación de las mismas bajo amenaza de sanción por incumplimiento de la normativa europea.
Llama la atención la diferencia de actitud entre este conflicto y otros. Los médicos que trabajamos en la sanidad pública venimos reclamando que las guardias médicas sean consideradas tiempo de trabajo en su totalidad. Es, en este período, donde se toman decisiones muy importantes, incluso de mayor trascendencia a las realizadas durante la jornada ordinaria al instaurar tratamientos con carácter urgente ante procesos agudos o complicaciones. Desde la administración sanitaria, a pesar de ser médicos muchos de sus cargos directivos, siempre se nos ha negado la equiparación de estos periodos de trabajo, considerando que las horas de guardia son de baja intensidad laboral, en base a criterios anacrónicos y trasnochados.
El resultado es una jornada desmedida con el consecuente deterioro de la atención al paciente por un médico cansado y con una vida familiar y personal cercenada. En el fondo sólo subyace un problema económico.
Hace ya seis años el SIMAP (Sindicato de Médicos de Asistencia Pública) denunció esta situación y el Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas de Luxemburgo, emitió una sentencia (asunto SIMAP) en el año 2000 de forma inequívoca: las horas de guardia son tiempo trabajado en su totalidad y la jornada laboral no debe exceder las 48 horas semanales. Pero en este último lustro la administración no ha cumplido con la normativa europea. Lo más una transposición confusa, que permite todo tipo de abusos, y adaptada a sus necesidades. Y no pasa nada. Debe ser que el caso de las eléctricas produce más luz y se ve más. O en realidad entran en juego cuestiones más importantes, como son el dinero y el poder estratégico. Más aún: la Comisión Europea ha avisado al gobierno de la Comunidad Valenciana que su nueva ley urbanística tampoco respeta la normativa europea. Y el gobierno valenciano ha respondido que no esperen y la lleven a los tribunales europeos. Claro. Les da igual. Aplicarán su criterio habitual: ni acatarlas ni cumplirlas.
Después se quejan de no encontrar médicos para la Sanidad Pública. Ya Henry Ford, icono empresarial del siglo XX, redujo en 1914 la jornada laboral de sus empleados a 8 horas diarias, con el objetivo de mantener a los trabajadores más cualificados en su empresa. Hace casi un siglo y todavía no han aprendido.
Blas Bernácer Alpera
Médico Internista.